12 julio 2007

¿Por qué escribo?

El escribir se ha vuelto algo bastante extraño, escribo para decir aquello que no me atrevo a decir, escribo para crear, para escapar, para querer, escribo para los demás, escribo para ti, escribo para mí.

Cuando escribes te transformas en un dios, por que, si de tu mente sale agua y la escribes, en ese momento habrá agua. Si dices vive, en ese momento un nuevo ser será creado y si dices muere ese ser desaparece.

Pero la vida no es algo que puedes escribir, es algo que esta ahí y alguien más la esta escribiendo; tal vez, todos ponemos un poco de nuestra parte para escribir nuestros libros, por que todos tenemos un pequeño libro donde escribimos y escriben para ir formando nuestra “historia” tal vez sería mejor decir “histeria”.

Cuantas veces no pensamos más de una vez como deberían de haber pasado las cosas, o diálogos que se debieron haber dicho, pero no, no sucedieron ni se dijeron.

Ahí es cuando dices: yo hubiera... y tal vez si...

Es cuando deseas poder escribirlo todo, escribir un lugar donde la gente no se muera, no se odie. Pero cada cual tiene una versión de la histeria, y por lo tanto nunca podríamos ponernos de acuerdo y nos limitaremos a vivir en un planeta lleno de pequeños universos paralelos íntimamente relacionados entre sí, pero separados por enormes brechas y grandes abismos.

Al momento de ser Dios tienes el don de hacer feliz o infeliz a los seres que haz creado, controlas su medio, sus vidas, sus mentes y su corazón. Tú decides a quien aman, a quien odian.

Ojalá yo hubiera podido escribir tú histeria, la haría con un poco más de alegrías con leves toques de tristeza, pero sobre todo la hubiera escrito con mucho amor, pondría un personaje que te amara y tú lo amarías igual, y la sonrisa de tu cara jamás se borraría.

Si yo pudiera escribir la mía, no la cambiaría, tal vez el hecho de haberte conocido, pero si no te hubiera conocido no hubiera sido “escritor”. Pero pensándolo bien cambiaría un poco a mi personaje, lo haría más como el que hice en tu historia. Así tú me amarías, yo te amaría y la sonrisa en tu cara sería mi sonrisa.

Pero no puedo, la vida no es algo que ni yo ni nadie puede escribir, solo la podemos vivir. Y vivir pensado que tal vez, solo tal vez, quepa la menor oportunidad de poder hacerlo no condenará a los diálogos: Y si yo hubiera... Que tal si... A lo mejor si yo...

Solo nos queda más que improvisar en esta gran obra, y sorprender de vez en cuando al escritor y a los espectadores.

Yo seguiré aquí, pensando, llorando, viviendo y tal vez escribiendo una histeria en la que él no haya muerto, no se haya ido y tal vez tú me ames.

Te Quiero

Te quiero, tanto como "te amo" lo puede decir, tanto como suspiros caben en "amor", como historias se le han contado al mar, lo suficiente para saturar mis dos hemisferios, pero sobre tanto como cabe en un corazón... el mío.

Nomás por que si

Dificil, mucho dificil, así es que empezaré con lo que escribí hace mucho tiempo, supongo que así es más facil